NAMASTÉ



"Yo honro el lugar dentro de ti donde el Universo entero reside. Yo honro el lugar dentro de ti de amor y luz, de verdad, y paz. Yo honro el lugar dentro de ti donde cuando tú estás en ese punto tuyo, y yo estoy en ese punto mío, somos sólo Uno."


Un día me levanté y ví que algo había cambiado a mi alrededor, en mi. Me inundaba una serena sensación de Paz y Amor por todo lo creado. Una simple florecilla me parecía entonces lo más hermoso y más grande en su perfección. La sonrisa de un niño, las lágrimas de un anciano... Mirarme a mi misma en el espejo... El mundo en sí parecía tener colores de recién pintado.

Al principio, yo no entendía a que podía deberse aquel cambio que sólo yo parecía ver. Nadie a mi alrededor parecía ser consciente de que todo a su lado brillaba de otra manera excepto yo. Llegue incluso a pensar si no estaría volviéndome loca, pero no. Simplemente había tomado conciencia de quien soy.

Poco a poco, al principio con paso inseguro y un tanto sola, fui iniciando mi camino. Buscaba a ciegas información en los sitios mas insospechados. Era como si una voz interior me guiase. (No puedo dejar de sonreír ante este comentario: "una voz interior".) Lejos estaba entonces de saber que era precisamente eso lo que me impulsaba a seguir.

Pronto comencé a conocer a gente que se encontraban en mi misma situación. Pronto comenzaron a aparecer en mi vida personas, Almas de Luz, que me fueron guiando, ayudando, consolando cuando tropezaba y caía y empujándome cuando parecía que iba a desistir en mi labor.

Comprendí que significaba haber DESPERTADO. Comprendí la tarea que tenía por delante para llevar a buen puerto la misión que se me encomendó. Aprendí lo ya sabido de nuevo, como si fuera de nuevo un bebe recién nacido. Viaje en mis sueños a las ciudades de sanación.

Ahora sé que soy Amor porque provengo del AMOR del PADRE y que como tal, estoy para difundir ese mismo Amor por todo lo que ÉL creó. Que mi meta está en ir evolucionando hacía la perfección y en ayudar a aquellos de nuestros hermanos que comiencen su caminar como un día fui ayudada yo.


*********


Por todo esto puedo y debo deciros:


Yo soy Drisana, la hija del Sol.


Ese es el significado de mi nombre, al menos el nombre más antiguo que recuerdo haber tenido en esta dimensión desde la primera vez que encarne en mi amada Lemuria.


En este aquí y ahora he vuelto de renacer, he despertado a la verdad y he recordado. Me he reconocido en cada un@ de mis herman@s. He reaprendido a amar al Padre-Madre y a toda su Sagrada y Divina Creación.


Y he sentido el llamado ancestral que anclado en lo más profundo de mi Esencia, me empuja a ayudar e iluminar desde la humildad de mi Ser y como persona humana, al resto de mis herman@s que ya están despertando.


Es tiempo de volver a Ser aquello que tan profundamente duerme dentro de nosotr@s. Tiempo de abrir los ojos del Alma, de avivar la llama imperecedera del AMOR Incondicional que se guarda en la cámara mas secreta de nuestros corazones. Tiempo de reconocer nuestra parte Divina. Tiempo de entender que como parte de la más Pura Luz del PADRE, tenemos un trabajo que hacer, una misión que cumplir.


Es tiempo de regresar al Hogar.


¡Despertar!


Llegó la hora de volver a ser Unidad con el UNO y de brillar con su Infinita Luz.


Desde la LUZ y con el AMOR más puro y profundo, os pido que repitáis conmigo:


YO SOY el/la que YO SOY y como tal me manifiesto en la Serena Paz, la Pura Luz y el Infinito Amor Incondicional del PADRE-MADRE.


YO SOY el/la que YO SOY



Que la LUZ del PADRE ilumine siempre nuestros corazones y junto con sus Ángeles y Arcángeles, seamos dignos y capaces de llegar al mismo centro de SU corazón,


La Paz y el Amor con nosotros.


Drisana

viernes, 31 de marzo de 2017

LA ABUNDANCIA NO SE ADQUIERE, SE SINTONIZA, por Dr. Wayne Dyer


LA ABUNDANCIA NO SE ADQUIERE, SE SINTONIZA
por Dr. Wayne Dyer

La abundancia no es algo que nosotros adquirimos; es algo que nosotros sintonizamos.

¿Qué es la abundancia? La abundancia es un estado del ser. La abundancia es el estado en el cual sientes que tienes todo lo que quieres. Es un sentimiento activo, una emoción. La abundancia está en tu humor vibratorio, la abundancia está en tus emociones diarias. La abundancia es parte de tu integridad y está en tu mente, cuerpo y espíritu. La abundancia no es una cuenta en dólares o cosas materiales como mucha gente piensa.

¿Qué es la pobreza? La pobreza también es un estado del ser. Pobreza es el estado de carecer de lo que quieres. Pobreza es el estado de resistencia para tener lo que quieres. Es un sentimiento activo, una emoción. La pobreza está en tu humor vibratorio, la pobreza está en tus emociones diarias. La pobreza es parte de tu integridad y está en tu mente, cuerpo y espíritu. La pobreza no es la ausencia de dinero en tu cuenta bancaria o cosas materiales como mucha gente piensa.

Si, la abundancia y la pobreza son estados del ser. Están en nuestras creencias, pensamientos y emociones. Por eso es que hay algunas personas que no tienen muchas cosas materiales y son felices, tienen abundancia en sus vidas porque ellos creen y sienten que tienen todo lo que ellos quieren; por otro lado, podemos ver algunas personas que tienen muchas cosas materiales y se rodean de lujos y están quejándose todo el tiempo porque no tienen suficiente. Este tipo de personas no tiene abundancia en sus vidas aun cuando ellos tienen todas las cosas materiales que quieren.

Siendo que la abundancia y la pobreza son estados del ser, podemos crearlas a través de nuestro humor vibracional, de nuestras emociones o estados de ánimo.

¿Qué estas creando diariamente? Si te estás quejando de la falta de dinero y diciéndote a ti mismo y a los demás que es muy difícil tener dinero, o que el dinero es un problema, estos sentimientos están bloqueando la abundancia y estas creando más pobreza. Pero tú puedes crear lo que quieras.

¿Qué quieres crear, pobreza o abundancia? Somos creadores y creamos cosas de adentro hacia afuera. La abundancia es una emoción, la emoción de tener todo lo que quieres sin importar las circunstancias.

Quizás estas pensando: Es fácil de decirlo, pero es muy difícil cuando tienes deudas y no tienes dinero para pagar las cuentas, y es correcto, es muy difícil, así que estás creando más pobreza cuando piensas de esa forma y empeoras tu situación. Si quieres crear abundancia en tu vida, la forma mas fácil es empezar con tus palabras. Las palabras crean pensamientos. La repetición de las palabras se convierte en creencias, y las creencias crean sentimientos; tú puedes activar esos sentimientos para convertirlos en emociones y tus emociones son tu humor vibracional.

Empieza por saber que tú te mereces sólo cosas buenas, lo mejor. La abundancia te está esperando, sólo necesitas estar en el mismo humor vibracional.

He aquí tres cosas que puedes hacer para estar en el humor correcto y permitir que la abundancia llegue a tu vida:

1. Repite y practica afirmaciones positivas: Yo merezco sólo cosas buenas. Yo soy abundancia. Cada célula de mi cuerpo, mente y espíritu está llena de abundancia. Yo estoy abierto(a) a recibir dinero en mi vida. El dinero llega a mí de diferentes formas.

2. Se agradecido por todo lo que tienes (no te quejes por las cosas que no tienes o que has perdido). La gratitud abre las puertas para recibir lo que estás pidiendo y te hace sentir merecedor. Gracias Dios por todo lo que tengo y por las cosas maravillosas que están por llegar a mí. No te acuestes sin agradecer de cinco a diez cosas que te ocurrieron durante el día. También puedes escribir tus afirmaciones de gratitud en tu diario de agradecimientos.

3. Practica el Tapping Meridiano* para corregir o cambiar tus creencias y estados de ánimo sobre el dinero y permitir que la abundancia llegue a tu vida.

El Universo está lleno de abundancia y está esperando para darte lo que es tuyo. Toma esfuerzo y mucha practica para cambiar tu pobreza en abundancia, pero vale la pena porque es lo que tú mereces. La abundancia es un estado del ser y tú puedes crearla ¿Qué estas esperando?

Dr. Wayne Dyer

jueves, 30 de marzo de 2017

LA ENSEÑANZA DE LOS ÁRBOLES, por Herman Hesse


LA ENSEÑANZA DE LOS ÁRBOLES, 
por Herman Hesse

Es difícil desasociar la sensibilidad artística de aquella que nos permite apreciar, y abrazar, el alma de la naturaleza. Incluso podríamos afirmar que la esencia primigenia de la estética, de las artes y de nuestras múltiples abstracciones en torno a la belleza, se origina en esa perfección retórica que pregonan las caídas de agua, las estructuras florales, los imperturbables desiertos o las intrigantes selvas.

Tomando en cuenta lo anterior, no debiera sorprendernos que Herman Hesse, el genial autor alemán, haya sido capaz de hilar un tributo literario a los árboles; esos pilares que irradian la más reconfortante sabiduría. Este fragmento fue tomado de su libro Wanderung: Aufzeichnungen (Berlin: Fischer, 1920; traducido al inglés como Wandering: Notes and Sketches y al español como El caminante).

“En sus copas susurran el mundo, sus raíces descansan en lo infinito, pero no se pierden en él, sino que persiguen con toda la fuerza de su existencia una sola cosa: cumplir su propia ley, que reside en ellos, desarrollar su propia forma, representarse a sí mismos. Nada hay más ejemplar y más santo que un árbol hermoso y fuerte. Cuando se ha talado un árbol y éste muestra al mundo su herida mortal, en la clara circunferencia de su cepa y monumento puede leerse toda su historia: en los cercos y deformaciones están descritos con facilidad todo su sufrimiento, toda la lucha, todas las enfermedades, toda la dicha y prosperidad, los años frondosos, los ataques superados y las tormentas sobrevividas. Y cualquier campesino joven sabe que la madera más dura y noble tiene los cercos más estrechos, que en lo alto de las montañas y en peligro constante crecen los troncos más fuertes, ejemplares e indestructibles.

Los árboles son santuarios. Quien sabe hablar por ellos, quien sabe escucharles, aprende la verdad. No predican doctrinas y recetas; predican indiferentes al detalle, la ley primitiva de la vida.

Un árbol dice: en mi vida se oculta un núcleo, una chispa, un pensamiento, soy vida de la vida eterna. Es única la tentativa y la creación que ha osado en mí la Madre Tierra. Mi misión es dar forma y presentar lo eterno en mis marcas singulares.

Un árbol dice: mi fuerza es la confianza. No sé nada de mis padres, no sé nada de miles de retoños que todos los años provienen de mí. Vivo hasta el fin del secreto de mi semilla, no tengo otra preocupación. Los árboles tienen pensamientos dilatados, prolijos y serenos, así como una vida más larga que la nuestra. Son más sabios que nosotros, mientras no les escuchamos. Pero cuando aprendemos a escuchar a los árboles, la brevedad, rapidez y apresuramiento infantil de nuestros pensamientos adquieren una alegría sin precedentes. Quien ha aprendido a escuchar a los árboles, ya no desea ser un árbol. No desea ser más que lo que es.”

Fuente:  culturainquieta.com

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*El árbol en flor que acompaña este texto, es un almendro. Se encuentra en la finca que mis padres tienen en el pueblo que nacieron y es uno de mis lugares favoritos de meditación cuando me retiro allí en mis silencios. 

Abrazar a un árbol, sentirse conectado con él en esencia, es una de las experiencias más hermosas, revitalizantes y purificadoras que se pueden sentir.

Cuando abrazas a un árbol, tus pies conectan con sus raíces como enraizándose con ellas y a través de ellas, con la madre Tierra. Y tus brazos se alargan hacia sus ramas que se elevan hacia el cielo, hacia nuestro origen, hacia el Hogar del Padre.

Sentirnos así, en unión plena con la Naturaleza, con la Creación, es algo fantástico, os invito a vivir la experiencia. Probar si no lo habéis probado nunca y ya me contareis como os sentís después.

Drisana.

miércoles, 29 de marzo de 2017

LOS PORTADORES DE SUEÑOS - - Gioconda Belli


LOS PORTADORES DE SUEÑOS  
Gioconda Belli
*
En todas las profecías
está escrita la destrucción del mundo.
Todas las profecías cuentan
que el hombre creará su propia destrucción.
*
Pero los siglos y la vida
que siempre se renueva
engendraron también una generación
de amadores y soñadores;
hombres y mujeres que no soñaron
con la destrucción del mundo,
sino con la construcción del mundo
de las mariposas y los ruiseñores.
*
Desde pequeños venían marcados por el amor.
detrás de su apariencia cotidiana
guardaban la ternura y el sol de medianoche.
Las madres los encontraban llorando
por un pájaro muerto
y más tarde también los encontraron a muchos
muertos como pájaros.
Estos seres cohabitaron con mujeres traslúcidas
y las dejaron preñadas de miel y de hijos verdecidos
por un invierno de caricias.
Así fue como proliferaron en el mundo los portadores sueños,
atacados ferozmente por los portadores de profecías
habladoras de catástrofes.
Los llamaron ilusos, románticos, pensadores de utopías
dijeron que sus palabras eran viejas
y, en efecto, lo eran porque la memoria del paraíso
es antigua al corazón del hombre.
Los acumuladores de riquezas les temían
lanzaban sus ejércitos contra ellos,
pero los portadores de sueños todas las noches
hacían el amor
y seguía brotando su semilla del vientre de ellas
que no sólo portaban sueños sino que los
multiplicaban y los hacían correr y hablar.
De esta forma el mundo engendró de nuevo su vida
como también había engendrado
a los que inventaron la manera
de apagar el sol.
*
Los portadores de sueños sobrevivieron a los
climas gélidos pero en los climas cálidos casi parecían brotar por
generación espontánea.
Quizá las palmeras, los cielos azules, las lluvias
torrenciales tuvieron algo que ver con esto,
la verdad es que como laboriosas hormiguitas
estos especímenes no dejaban de soñar y de construir
hermosos mundos,
mundos de hermanos, de hombres y mujeres que se
llamaban compañeros,
que se enseñaban unos a otros a leer, se consolaban
en las muertes,
se curaban y cuidaban entre ellos, se querían, se
ayudaban en el
arte de querer y en la defensa de la felicidad.
*
Eran felices en su mundo de azúcar y de viento,
de todas partes venían a impregnarse de su aliento,
de sus claras miradas,
hacia todas partes salían los que habían conocido
portando sueños soñando con profecías nuevas
que hablaban de tiempos de mariposas y ruiseñores
y de que el mundo no tendría que terminar en la
hecatombe.
Por el contrario, los científicos diseñarían
puentes, jardines, juguetes sorprendentes
para hacer más gozosa la felicidad del hombre.
*
Son peligrosos - imprimían las grandes rotativas
Son peligrosos - decían los presidentes en sus discursos
Son peligrosos - murmuraban los artífices de la guerra.
Hay que destruirlos - imprimían las grandes rotativas
Hay que destruirlos - decían los presidentes en sus discursos
Hay que destruirlos - murmuraban los artífices de la guerra.
*
Los portadores de sueños conocían su poder
por eso no se extrañaban
también sabían que la vida los había engendrado
para protegerse de la muerte que anuncian las
profecías y por eso defendían su vida aun con la muerte.
*
Por eso cultivaban jardines de sueños
y los exportaban con grandes lazos de colores.
Los profetas de la oscuridad se pasaban noches y días enteros
vigilando los pasajes y los caminos
buscando estos peligrosos cargamentos
que nunca lograban atrapar
porque el que no tiene ojos para soñar
no ve los sueños ni de día, ni de noche.
*
Y en el mundo se ha desatado un gran tráfico de
sueños que no pueden detener los traficantes de la muerte;
por doquier hay paquetes con grandes lazos
que sólo esta nueva raza de hombres puede ver
la semilla de estos sueños no se puede detectar
porque va envuelta en rojos corazones
en amplios vestidos de maternidad
donde piesecitos soñadores alborotan los vientres
que los albergan.
*
Dicen que la tierra después de parirlos
desencadenó un cielo de arcoiris
y sopló de fecundidad las raíces de los árboles.
Nosotros sólo sabemos que los hemos visto
sabemos que la vida los engendró
para protegerse de la muerte que anuncian las
profecías.



Gioconda Belli

martes, 28 de marzo de 2017

HUEHUETLAHTOLLI - Palabra de los Antiguos, texto tradicional Tolteca


HUEHUETLAHTOLLI
Palabra de los Antiguos, texto tradicional Tolteca

Estos consejos forman parte de un texto tradicional de los antiguos Toltecas Nahuas llamado Huehuetlahtolli o Wewetla'tolli, antiguas palabras . La selección ha sido tomada de dos colecciones principales:

a) Huehuetlahtolli del padre Viseo. 
b) Libro VI del Códice Florentino.


Capítulo I

1. "He aquí lo que nos dieron a guardar, la Antigua Palabra, donde se dice que una vida pura es como una turquesa preciosa, un jade redondo, un dulce canto sin mancha y sin sombra, salido del corazón."

2. "Sería una burla si yo ocultara uno solo de estos consejos, pues ellos son para vivir sobre la tierra y con ellos nos haremos atentos a todas las cosas."

3. "Es un saber que, como espina y viento helado, pasará sobre ti, que te arrojará a la tierra y te abatirá, para que vuelvas." 

4. "¿Serás tú el que atienda, el que escuche, el que consiga endiosar su corazón, el que reciba y guarde adentro, para que te vaya bien, para que alcances merecimiento y vivas sobre la tierra?"


Capítulo 2

1. “Hay una Deidad, Quetzalcóatl es su nombre. Nada exige. Sólo serpientes y mariposas, eso le ofreceré y le daré."

2. "Nuestros padres y abuelos nos exhortaron diciendo que él nos creó:
él, cuyas criaturas somos, nuestro Señor, nuestra Abuela. También creó los cielos, el Sol y la divina tierra."

3. "Así fue, en verdad: por su merecimiento y por su sacrificio, él inventó a los hombres y nos hizo seres humanos. De ese modo llegó a ser la Serpiente Emplumada, Señor y Señora de toda creación."

4. "Trece son los cielos, nueve los inframundos. Allí vive el Dios verdadero, la esencia del Cielo. De allí recibimos la vida nosotros, los Merecidos, de allá cae nuestro destino cuando se escurre un niñito hacia la tierra."

5. "Porque él lo dijo, porque él lo ordenó para sí, por eso existimos. No lo olvides ni de día ni de noche; invócale en suspiro, en aflicción."

Capítulo 3

1. "En este mundo caminamos por lugares escarpados, un abismo de un lado y un abismo del otro. Si te mueves para acá o para allá, ¿cómo evitarás caer? Sólo en el medio es posible avanzar."

2. "No te vistas de bordados ni te pongas harapos. No seas presumido, pero tampoco corriente. Que tu palabra no sea entrecortada ni muy larga. No alces tu voz ni la bajes demasiado. No camines deprisa, pero tampoco muy lento. Y no tomes nada como regla absoluta."

3. "Evita los extremos, mantente en el medio, porque sólo en el medio existe la función social, la condición honorable."


Capítulo 4 

1. "En la infancia, cuando aun está libre la persona, es cuando tiene compasión de ella Nuestro Señor y le da sus dones. Y es en la infancia, en la edad de la pureza, cuando se merece una buena muerte."

2. "Por eso dicen los viejos que los niñitos, los chicos y las chicas, son los amigos queridos de Señor del Cerca y el Junto, y viven a su lado, y junto a él se alegran y él es su amigo."

3. "Por eso los sabios espirituales, los Merecidos, los ayunadores, tienen mucha confianza en los niñitos, pues, en verdad, son de corazón bueno, sin mezcla, limpios, atentos, perfectos. Se dice que por ellos permanece la tierra y ellos son nuestra paz."

Capítulo 5

1. "El tolteca es sabio, es una lumbre, una antorcha, una gruesa antorcha que no ahuma. Hace sabios los rostros ajenos, les hace tomar un corazón. No pasa por encima de las cosas: se detiene, reflexiona, observa."

2. "Un tolteca todo lo saca de su corazón; es abundante, múltiple, inquieto, hábil, capaz; a sí mismo se adiestra, dialogando con su corazón, encontrando respuestas dentro de sí. Obra con deleite, hace las cosas con calma, con tiento, como un artista. Compone lo defectuoso, armoniza lo disperso. Por él, las cosas ajustan."

3. "En cambio, el falso tolteca obra al azar y es una burla a la gente. Opaca las cosas, les pasa por encima y las hace sin cuidado. En lugar de crear, imita; defrauda a los demás y es un ladrón."

4. "De este modo te convertirás en toltecas: si adquieres hábito y costumbre de consultarlo todo con tu propio corazón. Sé tolteca: una persona de experiencia propia."

Capítulo 6 

1. "El maestro es luz, tea, espejo. Suyas son la tinta negra y la roja, los códices. Él mismo es escritura y sabiduría, camino y guía veraz. Conduce a las personas y a las cosas, y es una autoridad en los asuntos humanos."

2. "Un maestro nunca deja de amonestar. Hace sabios los rostros ajenos, nos hace tomar un rostro y desarrollarlo, abre nuestros oídos, nos ilumina. Es guía de guías y ofrece un camino. De él, uno depende."

3. "Él pone un espejo ante nosotros para que seamos cuerdos y atentos, nos obliga a cobrar identidad. Se concentra en sus obras, regula su camino, dispone y ordena, aplica su luz sobre el mundo. Por eso, conoce lo que hay sobre este mundo y en la región de los muertos."

4. "Gracias a él, todos somos corregidos, enseñados. Por él, el niño humaniza su querer y recibe una estricta educación. Conforta el corazón de quienes le rodean dando ayuda, remedio y curación."

5. "El falso maestro, en cambio, es como un médico que ignora su oficio o un hombre sin cordura: dice que sabe acerca de lo divino, que tiene la tradición y la guarda, pero es sólo vanidad. Es jactancioso, inflado; es un torrente, un peñascal."

6. "Amante de la oscuridad y los rincones, es un ‘sabio' misterioso, un ‘chamán' con secretos, un ‘ensoñador' que roba a su público, pues le despoja de algo. Es un hechicero, pues tuerce los rostros y los extravía, haciendo que los demás pierdan su identidad."

7. "Es falso, pues encubre las cosas, tornándolas más difíciles de lo que son y destruyéndolas. Hace perecer a quienes le siguen a fuerza de misterios. Acaba con todo."


Capítulo 7 

1. "Conoce ahora al médico verdadero: es sabio, da vida, prueba las hierbas, piedras, árboles y raíces, ensaya sus remedios, examina, experimenta."

2. "El médico tolteca alivia las enfermedades, da masajes, concierta los huesos, purga a la gente, hace que se sientan bien, les da brebajes, los sangra, corta, cose, hace reaccionar, cubre con ceniza."

3. "El médico falso, en cambio, se burla de su prójimo y, en su burla, mata a la gente con medicinas. Provoca indigestión y empeora las enfermedades."

4. "Es un hechicero, pues se esconde en sus secretos; posee semillas y hierbas maléficas. Es un brujo que, en lugar de experimentar, echa suertes. Mata con sus remedios, empeora, ensemilla, enyerba."

Capítulo 8 

1. "He aquí al padre verdadero: es raíz y principio de linaje de hombres. Bueno es su corazón, recibe las cosas, es compasivo y se preocupa. De él es la precisión y el apoyo, con sus manos protege. Cría y educa a los niños, les amonesta y enseña a vivir. Les pone delante un gran espejo, una gruesa antorcha que no ahuma."

2. "Y el hombre maduro: un corazón firme como piedra, un rostro sabio. Es dueño de su rostro y de su corazón. Hábil y comprensivo, buen componedor de textos, es un tolteca de la tinta negra y roja, un entendido. Dios está en su corazón y diviniza con su corazón las cosas; dialoga con su propio corazón."

3. "Y el verdadero artista: un conocedor de colores. Los aplica, sabe de matices y armonías. Dibuja pies, caras, les da sombra y relieve, logra efectos. Como tolteca, pinta los colores de todas las flores."


Capítulo 9 

1. "Acércate al que es modelo y ejemplo, pauta y señal, libro y pintura; a la persona honorable y de buena fama, a la condición social, la luz, la antorcha, el espejo."

2. "Observa a mis sacerdotes, los Merecidos, los de vida pura: son trasparentes, buenos, rectos, dedicados, limpios, de corazón blanco, de vida sin mezcla, sin polvo ni impureza. Ellos llegan hasta la presencia de Señor del Cerca y el Junto, le ofrecen incienso, le oran y le ruegan por el pueblo."

3. "Acércate a quienes, por todas partes, van haciendo lo excelente, dando brillo, dejando lo bueno, imponiendo el orden con prudencia, alegría y serenidad. A quienes son cofre y caja, sombra y abrigo, gruesa
ceiba, sabino generoso que da brotes y se yergue poderoso, firme."

4. "Ve con quienes no se quedaron dormidos ni se ocultaron en el sueño. Con quienes no desgarraron sus labios. Con quienes llevan en paz, sobre sus brazos y espaldas, a aquel (pequeñín) que va jugando, se divierte con tierra y duerme en la redecilla."

5. "En cambio, huye de estos sitios: el festín, el río y el camino. No te detengas allí, porque allí está, allí habita el gran devorador: la mujer ajena, el esposo ajeno, la prosperidad, la falda, la camisa ajena."

Capítulo 10  

1. "Amaos los unos a los otros, ayudaos entre vosotros en la necesidad con la manta, la joya, el salario y el alimento. Pues no es verdad, no es cierto si desprecias a quienes te rodean."

2. "Da limosna al hambriento, aunque tengas que quitarte tu comida. Viste al que va en harapos, aunque tu mismo quedes desnudo. Socorre al que te necesita, aún a costa de tu vida. Mira que es una vuestra carne y una vuestra humanidad."

3. "Recuerda al anciano, la anciana, el indigente, el desdichado, al que no se alegra, al que no es feliz, al que tiene pegado el intestino (de hambre), al que no encuentra su casa y vive en confusión, al que derrama sus lágrimas y muerde sus uñas (de desesperación)."

4. "A quienes llevan las manos atadas a la espalda, a quienes, donde las fieras, en las cárceles de la miseria van penando. A quienes, por los desiertos y los montes, se fatigan tras el chile y la sal, las verduras y el agua. A quienes son engañados en las plazas y tienen los labios resecos."

5. "Pon junto a ti a quienes son las manos y los pies del pueblo. No con indiferencia los saludes, ni con negligencia soportes sus cargas. Pues eres guerrero águila, ocelote, eres el sostén y el remedio."

Capítulo 11

1. "En cualquier sitio puedes tropezarte con ellos: un anciano, una anciana, un enfermo, un niño. Por lo tanto, no tienes excusa."

2. "En cualquier sitio puedes encontrar a quien trabaja, a quien se expresa, a quien está creando algo. No estorbes entonces ni causes problemas a causa de tu ignorancia."

3. "En cualquier sitio puedes inadvertidamente romper una cabeza, violentar a alguien, arrojar orina sobre otro, hacer que otro pierda la buena palabra con que habla, ignorar un consejo. No te distraigas."

4. "¡Despierta, ponte atento! No sea que el sueño te lleve y los demás te apoden ‘Señor ronquidos, bola soñolienta'."


Capítulo 12 

1. "Bueno es que te mantengas por ti mismo. Crea, trabaja, recoge leña, labra la tierra, siembra nopales; con eso beberás y vestirás. Pues honra, enaltece el trabajo duro."

2. "Pero, ¡cuídate de las obras mundanas! Porque mucho crece, muy rápido engorda lo que enferma, lo que atormenta, lo que fatiga, lo que causa espanto."

3. "Correcto es si junto a ti es dicha la buena palabra, la que no causa daño. Si la transmites, no le excedas ni le quites: sólo lo justo dirás."

4. "Pero, ¡huye de las palabras vanas, distraídas! Porque sólo pervierten, no son serenamente rectas. Precipitan al hueco a quien las pronuncia, nos llevan a la trampa y al lazo, a la piedra y el palo."


Capítulo 13 

1. "Con llanto y preocupación hay que recibir la herencia y la fortuna. Pero es cálido es el hogar del pobre, y están tranquilos su esposa y sus hijos."

2. "¿Naciste noble? Teme por ello; podría embriagarte o hacerte presuntuoso. He aquí lo que nos hace nobles: tomar la antorcha y el jabón, el chile y la cal, el azadón y la semilla. Esto, en verdad, es linaje y merecimiento."

3. "Se moderado y austero. Verifica que los demás coman primero; entonces toma agua y lava sus manos y sus bocas. Que, no por ser noble, perderás tu nobleza, ni caerán los jades, las turquesas, de tus manos llenas."

4. "Se dice que hay heredero al trono. He aquí como mostrara su condición: si baja su cabeza y se inclina con humildad; si mira al pobre con especial consideración; si le infunden respeto su mísero ceñidor, su manto raído; si, encontrando en el camino una anciana, un anciano, le dice: ‘Padre mío, mi abuela: que la paz te encamine, que no tropiece tu pie'."

5. "Escucha: la cortesía, la modestia, la humildad, el llanto, el esfuerzo, eso te hará noble, amado, enaltecido. Escucha, ningún soberbio, jactancioso o desvergonzado llegó jamás al reino."


Capítulo 14 

1. "Conoce los símbolos, las palabras. Canta bien, habla bien, conversa bien, responde bien, ora bien. La palabra no es algo que se compre."

2. "Conoce la condición honorable, lo que es bueno: no cometas adulterio, no te embriagues de forma inmoderada, no te sometas al juego ni al azar, no menciones tu linaje ni tu condición viril, no seas indiscreto ni cobarde, no procures los primeros lugares."

3. "Que tu corazón no sea tu madre. Que la ceniza esparcida y la muerte no te detengan."


Capítulo 15  

1. "Pide con entera humildad, suplica con justicia: he ahí concentrado todo el ritual. Pues satisface, compensa el labio que se manifiesta en súplica."

2. "¿Es que ya lo sabes todo sobre la tierra? ¿No estás, acaso, tanteando con los pies? ¿Te conduces a ti mismo? ¿No eres aún llevado, cargado? Mañana o pasado mañana, ¿quizás llegaremos a saber aquello que sólo Él y únicamente Él, conoce?"

3. "Recuerda que te está viendo Nuestro Señor, el que conoce el interior de la piedra y el palo, el que escudriña el corazón del hombre. ¡Nadie conoce su poder, nadie conoce su peso! ¡No es cierto que vivimos sobre la tierra!"


Capítulo 16 

1. "Hay un hombre que vive en embriaguez y en sus manos se babea. Ha manchado su cuello, se apresta a difamar, se apropia de las cosas y da alaridos, pues la hierba y el vino le han atado."

2. "Ese ya no sale por su salida ni vive su propia vida, ya no corre su carrera, no tiene rostro ni orejas. Ya no canta, no dice, no se expresa; a la hora del grito, ya no puede gritar. No tiene camino ni conoce el orden, pues no presta atención a la palabra antigua, aquella que eleva, que expresa."

3. "Solo, sin reflexión, vive, moviéndose de continuo, cayendo de repente. Desgarrado, revolcándose en su inmundicia, así vive. No se levanta en paz ni se acuesta en alegría. Como conejo se inquieta, como venado huye."

4. "En ceguedad vive y no sale de ahí, ya no quiere crecer. Únicamente anhela escabullirse, tan sólo rechaza con el pie. Nada comprende ni retiene, no es civil. Se arroja contra sí mismo, se abandona a las dudas, da golpes, gruñe, lanza mordidas."

5. "Ese violó la voluntad de Nuestro Señor y, por eso, ya no extiende su brazo cuando debe extenderlo ni va al sitio a donde debía ir; ya no entrará a donde deba entrar ni morirá cuando deba morir."


Capítulo 17 

1. "Cuanto puedas, produce y ambiciona las flores de Aquel que te dio la vida, Aquel por Quien vivimos. Puedes vivir a Su lado en este día que, en préstamo, has venido a pedirle."

2. "Regresa junto a Él, ten conciencia de tu dueño, pues se duele, se enfada cuando le olvidas y, puesto que sois uno, devuelve a tu corazón su pena y su olvido."

3. "Busca y reconoce qué es lo que Él quiere de ti sobre la tierra. Como cuando buscamos algo a tientas, como cuando pintamos un libro, ve así: lento, pero sin detenerte. Identifica en qué consisten el infortunio y la desdicha, la inhumanidad y la pérdida, y así no vivas."

4. "Sólo en tu propia paz, en tu prudencia, ve adelante, sin vacilación ni dudas, para que de ese modo no entristezcas mi corazón. Con toda tu atención, serenamente, así vive."

5. "Y no te aflijas por la pobreza humana, no te enfermes por ello ni tus entrañas adelgacen, ni desfallezca tu corazón ante lo retorcido, ante lo que no es recto. ¿Es que sólo tibieza, bondad, ha de ser nuestra suerte?"

6. "Sé un guerrero. Arrójate al Ser del Cielo, Aquel que nos da vida. Con toda tu fuerza, con todo tu aliento, átate a lo alto, ve junto a él, arrójate a él. Y ocurrirá que él mismo llegará a ser raíz de tu existencia."


Capítulo 18 

1. "¿Has recibido Su aliento, Su palabra? Guárdalo en tu corazón como algo secreto. Que no te aturda ni embriague ni te cause orgullo. Ya comprenderéis cómo a nada, a nadie olvida Nuestro Señor."

2. "Entra en la bienaventuranza de la Deidad. Baja tu cabeza, flexiona tus rodillas, adopta una postura atenta, acostumbra tus piernas. Resbala, deslízate hacia Nuestro Señor. Y, si algo te atormenta, si algo interfiere tu fluir, disípalo en su dicha y afirma tu vida."

3. "Entra en la presencia del Dueño del Cerca y el Junto, el Humano, el que es Noche y Viento (invisible e impalpable). Ofrécele enteramente tu corazón y tu cuerpo, concéntrate en Él donde estás, acércalo a tu rostro, a tu corazón."

4. "Mas aún: disfruta la riqueza de Aquel que te atormenta, Aquel que te hace puro. Su agua de intenso azul, su agua de jades, su vaso de turquesa ha depositado en ti, para lavar tu alma y tu vida, y merecerte."

5. "No murmures nada en tu interior, nada digas ni pienses en forma reactiva del yerbazal (de tu mente), pues dentro del palo y la piedra (alma y el cuerpo) ve y escucha Nuestro Señor. Si, en verdad, controlas tus distracciones, él dispondrá algún remedio para tu necesidad."

6. "Concéntrate enteramente en Él. El nombre y la gloria de Aquel que todo lo puede es lo único que causa gozo. Él reparte su gloria allá, en lo alto, para todos. Y cuando una persona buena la recibe, se vuelve cual un ave excelente; de su cola, de sus alas brotan padres y madres, brotan aquellos que nos guían en cualquier rincón del Universo en que existamos."

Capítulo 19 

1. "Hijo mío, esto que te doy a comer es alimento puro. Lo que es para comer aquí en la tierra, acércalo a tu rostro. No te hagas semejante a piedra, pues ya sabes que, si una piedra es dura, no sólo una vez se le golpea, hasta que se quiebra."

2. "Observa al venado cuando lo persiguen: va asustado. Ignora a dónde va: al hueco, a la muerte. Y tú, ¿acaso eres venado para que no sepas a dónde vas? Pues te ha sido mostrado el camino; por tu propia voluntad te traicionarías si lo pierdes. "

3. "Mira: como el árbol florido ya no retoña ni echa brotes - pues sólo retoña y reverdece si resiste la helada, que de otro modo se marchita y seca -, así tú, si no retoñas y echas ramas a la hora del verdor y el renuevo, por tu propia voluntad te habrás arrojado a la boca de las fieras."

4. "Ahora que Nuestro Señor te ha mostrado su bondad, ahora que dentro de ti se agita, no lo desprecies. No juegues con un poco en tu interior para devolvérselo luego, hastiado, pensando: ¿en verdad he sido sanado?"

5. "Ahora que te has acercado a la riqueza que de su presencia viene, ¿lo ofenderás de nuevo? ¿Volverás a ensuciar tu ser, tu alma?"

6. "Con todo, aún si caes muchas veces y de nuevo recuerdas a tu Señor y te limpias sinceramente frente a él, arrojando tu mancha en su presencia, una vez más él tendrá piedad de ti y te mirarán sus ojos."

7. "Ve, disfruta de tu tesoro, que viene del seno de Nuestro Señor."

Capítulo 20 

 1. "He aquí mi disposición final, aquello que os identificará como mis seguidores, lo que debéis seguir y compartir, pues es alimento escogido. Sólo tres consejos deseo encomendaros:

2. "El primero, que busquéis con anhelos ser amigos de Aquel que está en todas parte, en todos los cuerpos, pues es Noche y Viento y Dueño del Cerca y el Junto."

3. "En tal empeño, mirad que no os hagáis orgullosos, desesperados o cobardes, sino humildes de corazón, poniendo toda vuestra esperanza en Nuestro Señor y atreviéndoos a mantener sus prescripciones."

4. "Lo segundo que debéis recordar: tened paz con todos los seres humanos, respetad a todos y a nadie agraviéis. Por nada del mundo avergonzaréis a otra persona. Calmaos, que digan de vosotros lo que quieran. Callaos aunque os combatan y no respondáis. Así demostraréis vuestra condición y vuestra nobleza, y todos sabrán que sois dignos representantes míos."

5. "Y lo tercero que os pido, es que no perdáis el tiempo que os ha dado la Divinidad sobre este mundo; ocupaos en lo que es bueno de día y de noche, no despreciéis el tiempo. Porque no sabéis si volveréis a vivir, o si reconoceréis vuestros rostros allá donde, de algún modo, se existe. Aprovechad esta vida."

6. "Basta con esto, que era mi misión. Haced en adelante lo que bien os pareciere. Toda persona que se atenga a su propio bien, allegará para sí lo bueno y conquistará la vida."


Traducción por Frank Díaz

FUENTE: Ekiria.org

Visto en: http://lioyenredo.blogspot.com.es/


lunes, 27 de marzo de 2017

ME DOY PERMISO PARA… - - Extracto del libro del mismo nombre de Joaquín Argente


ME DOY PERMISO PARA…
Extracto del libro del mismo nombre de Joaquín Argente


Me doy permiso para separarme de personas que me traten con brusquedad, presiones o violencia, de las que me ignoran, me niegan un beso, un abrazo...

No acepto ni la brusquedad ni mucho menos la violencia aunque vengan de mis padres o de mi marido, o mujer.

Ni de mis hijos, ni de mi jefe, ni de nadie.

Las personas bruscas o violentas quedan ya, desde este mismo momento fuera de mi vida.

Soy un ser humano que trata con consideración y respeto a los demás. Merezco también consideración y respeto.

Me doy permiso para no obligarme a ser “el alma de la fiesta”, el que pone el entusiasmo en las situaciones, ni ser la persona que pone el calor humano en el hogar, la que está dispuesta al diálogo para resolver conflictos cuando los demás ni siquiera lo intentan.

No he nacido para entretener y dar energía a los demás a costa de agotarme yo: no he nacido para estimularles con tal de que continúen a mi lado.

Mi propia existencia, mi ser; ya es valioso.

Si quieren continuar a mi lado deben aprender a valorarme.

Mi presencia ya es suficiente: no he de agotarme haciendo más.

Me doy permiso para no tolerar exigencias desproporcionadas en el trabajo.

No voy a cargar con responsabilidades que corresponden a otros y que tienen tendencia a desentenderse.

Si las exigencias de mis superiores son desproporcionadas hablaré con ellos clara y serenamente.

Me doy permiso para no hundirme las espaldas con cargas ajenas

Me doy permiso para dejar que se desvanezcan los miedos que me infundieron mis padres y las personas que me educaron. El mundo no es sólo hostilidad, engaño o agresión: hay también mucha belleza y alegría inexplorada.

Decido abandonar los miedos conocidos y me arriesgo a explorar las aventuras por conocer.

Más vale lo bueno que ya he ido conociendo y lo mejor que aún está por conocer. Voy a explorar sin angustia.

Me doy permiso para no agotarme intentando ser una persona excelente.

No soy perfecto, nadie es perfecto y la perfección es oprimente.

Me permito rechazar las ideas que me inculcaron en la infancia intentando que me amoldara a los esquemas ajenos, intentando obligarme a ser perfecto: un hombre sin fisuras, rígidamente irreprochable. Es decir: inhumano.

Asumo plenamente mi derecho a defenderme, a rechazar la hostilidad ajena, a no ser tan correcto como quieren; y asumo mi derecho a ponerles límites y barreras a algunas personas sin sentirme culpable.

No he nacido para ser la víctima de nadie.

Me doy permiso para no estar esperando alabanzas, manifestaciones de ternura o la valoración de los otros.

Me permito no sufrir angustia esperando una llamada de teléfono, una palabra amable o un gesto de consideración.

Me afirmo como una persona no adicta a la angustia.

Soy yo quien me valoro, me acepto y me aprecio No espero a que vengan esas consideraciones desde el exterior.

Y no espero encerrado o recluido ni en casa, ni en un pequeño círculo de personas de las que depender.

Al contrario de lo que me enseñaron en la infancia, la vida es una experiencia de abundancia.

Empiezo por reconocer mis valores, Y el resto vendrá solo. No espero de fuera.

Me doy permiso para no estar al día en muchas cuestiones de la vida: no necesito tanta información, tanto programa de ordenador, tanta película de cine, tanto periódico, tanto libro, tantas músicas.

Decido no intentar absorber el exceso de información. Me permito no querer saberlo todo. Me permito no aparentar que estoy al día en todo o en casi todo.

Y me doy permiso para saborear las cosas de la vida que mi cuerpo y mi mente pueden asimilar con un ritmo tranquilo.

Decido profundizar en todo cuanto ya tengo y soy. Con lo que soy es más que suficiente. Y aún sobra.

Me doy permiso para ser inmune a los elogios o alabanzas desmesurados: las personas que se exceden en consideración resultan abrumadoras. Y dan tanto porque quieren recibir mucho más a cambio.

Prefiero las relaciones menos densas.

Me permito un vivir con levedad, sin cargas ni demandas excesivas. 

No entro en su juego.

Me doy el permiso más importante de todos: el de ser auténtico.

No me impongo soportar situaciones y convenciones sociales que agotan, que me disgustan o que no deseo. No me esfuerzo por complacer.

Si intentan presionarme para que haga lo que mi cuerpo y mi mente no quieren hacer, me afirmo tranquila y firmemente diciendo que no. Es sencillo y liberador acostumbrarse a decir "no".

Me doy el permiso más importante de todos: el de ser auténtico. No me impongo soportar situaciones y convenciones sociales que agotan, que me disgustan o que no deseo. No me esfuerzo por complacer.

Elijo lo que me da salud y vitalidad.

Me hago más fuerte y más sereno cuando mis decisiones las expreso como forma de decir lo que yo quiero o no quiero, y no como forma de despreciar las elecciones de otros.

No me justificaré: si estoy alegre, lo estoy; si estoy menos alegre, lo estoy; si un día señalado del calendario es socialmente obligatorio sentirse feliz, yo estaré como estaré.

Me permito estar tal como me sienta bien conmigo mismo y no como me ordenan las costumbres y los que me rodean: lo "normal”"y lo "anormal" en mis estados emocionales lo establezco yo.


Joaquín Argente
  
*JOAQUÍN ARGENTE: diafreoterapeuta, "cuyo trabajo consiste en ayudar a las personas a recuperar la elasticidad del diafragma, el gran músculo de la respiración y la circulación energética que actúa también como puente entre el consciente y el subconsciente".